jueves, 13 de marzo de 2014

Dormir bien es importante

El sueño y el descanso son esenciales para mantener la buena salud y el bienestar emocional, durante las horas de sueño nuestro cuerpo tiene la posibilidad de recobrar energía, regenerar células y reparar tejidos. La falta de sueño puede causar disminución del rendimiento intelectual, problemas de memoria y alteraciones en el estado de ánimo como irritabilidad y depresión.

Cada persona tiene necesidades de sueño diferentes, los adultos sanos por lo general necesitan un promedio de 8 horas diarias de sueño , sin embargo algunas personas con 6 horas pueden funcionar bien y otras en cambio pueden necesitar un promedio de 10 horas. Suele pensarse que las personas mayores duermen menos, pero en realidad necesitan la misma cantidad de horas de sueño ; lo que ocurre es que es más difícil mantener el sueño durante las 6 u 8 horas seguidas.

Lo más importante es que además de dormir las horas necesarias, podamos tener un sueño de calidad y reparador, que nos permita recuperar la energía física y cerebral. Esto puede lograrse mejorando nuestros hábitos y rutinas a la hora de dormir:

· Mantener un horario regular para irse a la cama y para levantarse puede ayudar a que el cuerpo tenga un ritmo biológico estable. Sobre todo las personas que tienen problemas de sueño, deben tener mayor constancia con los horarios para dormir y despertarse.
·  Ducharse con agua tibia antes de irse a la cama, contribuye a que nuestros músculos se relajen, y el cambio en la temperatura corporal puede ayudar a inducir el sueño.
·  Hacer actividades tranquilas y relajantes en las horas previas a irse a la cama, por ejemplo escuchar música tranquila. Evitar el uso de aparatos electrónicos como ordenadores, consolas de vídeo juegos, entre otros, ya que por lo general tienden a activarnos física y mentalmente.
·   Puede ser aconsejable analizar las condiciones ambientales de nuestra habitación, para hacer los ajustes necesarios que nos faciliten el descanso: temperatura, ventilación, ruidos, comodidad de la cama y/o el colchón, iluminación, etc.
· Hacer ejercicio físico regular puede ayudarnos a dormir mejor, eso sí, procurar no hacerlo muy cerca de la hora de irse a la cama.
· Evitar el consumo de sustancias que activen nuestro sistema nervioso y afecten la posibilidad de conciliar el sueño:  cafeína, alcohol y tabaco.
· Evitar consumir mucha cantidad de alimentos o hacer comidas pesadas cerca de la hora de dormir, ya que esto interfiere con el buen descanso. Es preferible hacer cenas ligeras, un par de horas antes de irse a la cama.
· Preferiblemente intentar despertarse sin usar la alarma del despertador y si es necesario usarla, procurar que no tenga un sonido muy fuerte y estruendoso.



No hay comentarios:

Publicar un comentario